La escasez de fórmula para bebés provocada por el cierre de la fábrica más grande de Estados Unidos obligó al gobierno de Joe Biden a comprar en México el equivalente a 16 millones de biberones de leche, que serán importados a partir del próximo fin de semana.
De acuerdo con la Casa Blanca, se transportarán 450 mil kilos de fórmula Gerber Good Start Gentle (Nestlé); con ello casi se duplicará la cantidad importada por EU hasta la fecha.
Desde que inició el problema de desabasto, en febrero pasado, la Administración de Fármacos y Alimentos (FDA) preveía incrementar las adquisiciones de este producto desde México, Chile, Irlanda y Países Bajos.
El anuncio de ayer incluye el transporte aéreo del equivalente de 1.65 millones de biberones de 225 gramos de la fórmula Nestlé NAN Supremepro 2 a Texas durante el fin de semana, y el equivalente de 5.5 millones de teteros de la fórmula Bubs, entre 26 de junio y 5 de julio.
Hasta el momento, las autoridades de EU habían transportado leche en polvo desde Europa y Australia, incluyendo dos cargas vía aérea que inician el fin de semana.
Lo que llevó al país a esta situación fue la clausura de una planta en Michigan de los laboratorios Abbott, la mayor fabricante de leche de fórmula del país, por razones sanitarias. La fábrica reabrió el 4 de junio al adoptar nuevos protocolos de sanidad y seguridad, pero volvió a cerrar hace más de una semana debido a daños por el clima.
La empresa detalló que necesita tiempo para evaluar los daños y volver a sanitizar la fábrica, luego de las tormentas eléctricas y las lluvias intensas que pasaron por el suroeste de Michigan, el 13 de junio.