Durante la sesión de la Comisión de Administración y Procuración de Justicia de la LXI Legislatura del Estado de Querétaro, se registraron momentos de tensión y confrontación entre ciudadanos, colectivos y legisladores, tras la discusión del dictamen sobre la despenalización del aborto.
La propuesta en análisis fue presentada por el diputado de Morena, Arturo Maximiliano García Pérez, en conjunto con el colectivo feminista ADAX Digitales, con el objetivo de reformar el marco normativo estatal en materia penal.
De acuerdo con los legisladores del grupo parlamentario de Morena, la sesión fue convocada para analizar “asuntos pendientes de la comisión”, sin especificar que se votaría la iniciativa relacionada con la interrupción legal del embarazo.
Al recinto acudieron grupos defensores de la vida, quienes portaban pancartas con mensajes como “Sí a la vida”, así como colectivas feministas que ingresaron al edificio legislativo y se manifestaron durante la lectura del dictamen.
Pese a las protestas y los reclamos entre los asistentes, el secretario de la comisión, Enrique Correa Sada, continuó con la lectura del documento, que posteriormente fue sometido a votación.
El dictamen fue rechazado con los votos de Enrique Correa Sada y del presidente de la comisión, Guillermo Vega Guerrero, ambos integrantes del grupo parlamentario del Partido Acción Nacional (PAN).
Entre los argumentos presentados para el rechazo se señaló que la Legislatura no está obligada a modificar la normativa penal respecto al aborto, ya que la Suprema Corte de Justicia de la Nación (SCJN) ha determinado que son los tribunales y juzgados quienes deben garantizar que no se criminalice a las mujeres que interrumpen su embarazo.
La sesión concluyó en medio de consignas y gritos de los grupos a favor y en contra de la despenalización, sin que se lograra consenso entre las partes, reflejando nuevamente la polarización social en torno al tema.