¡HALA M4DRID!

 

El domingo 14 de Enero del 2024, se disputó la edición 40 de la Supercopa de España en Arabia Saudita con un Clásico como protagonista. El Real Madrid alzó la copa tras humillar con un contundente 4-1 al FC Barcelona en un partido histórico para ambas escuadras, “los merengues” recordarán una exhibición sin igual, mientras que “los blaugranas” desearán olvidar una noche sepulcral.

Analicemos las claves de un partido que tuvo un solo color.

Los técnicos: Un encuentro comienza a ganarse desde el planteamiento, en este caso me parece que Ancelotti ganó el partido desde antes de jugarlo. Xavi Hernández sigue demostrando que es un entrenador muy inexperto, varias veces la leyenda se ha equivocado fuertemente en su parado táctico, nadie en este mundo esta exento de equivocarse, incluso los mejores técnicos han cometido errores, sin embargo, lo que importa es como solucionas esos problemas que tú mismo creas; el entrenador del Barça cometió un suicidio en su parado táctico al jugar con la línea defensiva prácticamente hasta el medio campo, replicando lo sucedido el año pasado en el Giuseppe Meazza frente al Inter, el Madrid aprovechó estos espacios con la velocidad de Rodrygo, y sobre todo de Vinícius, para sentenciar el partido desde muy temprano.

Los jugadores: Sin duda alguna en este partido se vio una diferencia abismal en las plantillas, a pesar de que el Barcelona tiene una gran plantilla con jugadores de primer nivel, me parece que el Madrid una vez más demuestra que sus jugadores son de clase mundial. Rodados, experimentados, talentosos, una plantilla de experiencia combinada con el fervor de experimentados, desde la seguridad en la portería de Lunin (a pesar de casi no participar), el momento de forma que muestra Dani Carvajal es espectacular, a Rüdiger le sentó increíblemente el blanco al ser prácticamente imparable, Kroos una vez más demostrando porque es una leyenda de este deporte, Bellingham apareciendo en los momentos clave, Rodrygo fungiendo excelente de “9” aunque no sea su posición, y sobre todo los aplausos se los lleva Vinícius JR brindándonos una exhibición de poderío al ser prácticamente imparable, con un ‘hat trick’ ante el eterno rival en una final, el brasileño firma la mejor actuación de su carrera.

El partido: Uno de los encuentros más desigualados que he visto entre ambos equipos, el clásico más triste que yo le he visto al FC Barcelona, y también los mejores 90 minutos que le he visto al Madrid en la temporada. La realidad es que desde el primer minuto los “merengues” no tuvieron rival, a pesar de que el Barça dominó la redonda desde el minuto 1 con posiciones muy largas, la realidad es que nunca pudo hacerle daño al rival; absolutamente en ningún momento hubo sensación de peligro en el arco de Lunin, esto, sumado a los errores defensivos de Koundé que firmó su peor actuación con la camiseta blaugrana, y de Araujo que provocó un penal y recibió una tarjeta roja, el Barcelona puso en bandeja de plata el partido. Por parte del Madrid todo lo contrario, no necesitó la posesión del balón para hacer daño, simplemente esperaba su momento… y cuando lo encontraba, envió balones largos hacía Vinicius, Rodrygo, o Bellingham, provocando que estos tres velocistas atacaran con latigazos imparables a una defensa mal parada. Esto destruyó al rival, el Madrid tuvo contra las cuerdas al Barça, y si “Los Blancos” hubieran querido, el partido hubiera terminado con una goleada más abultada, sin embargo, el respeto y el no querer hacer sangre en el rival, nos dejó con una goleada histórica que pudo haber sido peor, aunque en sensaciones el meneo fue muy grande.

El Rey de Reyes: El gran tiburón blanco lo hace de nuevo, tras la obtención de la Supercopa de España el Real Madrid suma 102 títulos oficiales en su palmarés, la mentalidad ganadora de este club es imponente al no jugar finales sino ganarlas. “Ahora toca ponerlo en la vitrina y mirar para adelante”, una frase dicha por Ancelotti que ejemplifica al 100 por ciento lo que es el Real Madrid, un club que fue pasado, es presente, y será futuro, porque “los Blancos” no viven de viejas glorias, más bien, ellos son la gloria. Sin duda alguna este equipo es y será para toda la eternidad, el mejor club en la historia del futbol.

El Clásico es el partido más importante en el planeta futbol, si es una final, su valor incrementa mucho más, es por eso que este partido será recordado; como el título número 102 en la vitrina del Real Madrid, y sobre todo, como una exhibición sin precedentes por parte de una generación histórica.

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