El Club Querétaro está escribiendo un nuevo capítulo en su historia. Uno que, lejos de ser una simple transición de dueños, representa una transformación profunda en su estructura, identidad y proyección a futuro. La llegada de Marc Spiegel como nuevo propietario de los Gallos Blancos de Querétaro no solo marca el inicio de una nueva era, sino que devuelve la esperanza a una afición golpeada por años de incertidumbre, malos manejos y promesas rotas.
La presentación oficial del empresario estadounidense y su grupo de inversionistas se llevó a cabo en el Estadio Corregidora, con la presencia de Mikel Arriola, presidente de la Liga MX, y el alcalde ‘Felifer’ Macías, quienes dieron su respaldo a este proyecto que promete estabilidad, profesionalismo y una visión global.
Una inversión que rompe moldes
La cifra ha sido contundente: 120 millones de dólares. Esa fue la inversión que realizó Spiegel junto a socios como Chris Spooner, Ed Malyon, Adrián Madero y otros empresarios, para tomar el control total del club. Esta operación no solo es una de las más importantes en la historia de Gallos, sino también una de las más significativas en la historia moderna del futbol mexicano.
En palabras del propio Spiegel, este proyecto no se trata únicamente de dinero, sino de valores, estrategia y comunidad.
“Queremos hacer que los negocios se sientan bienvenidos a este club. Somos un grupo que cree en la data y la analítica desde un punto de vista deportivo y comercial. Creemos en el contenido, tenemos una gran plataforma y una ciudad con una masa grande de aficionados. Gallos cumple 75 años y queremos sumar”.
Esa combinación entre tecnología, análisis y pasión parece ser el eje rector de esta nueva administración, que llega con una estructura inspirada en modelos europeos y estadounidenses, pero con los pies bien plantados en el corazón de Querétaro.
Valores como piedra angular
Spiegel fue claro: este no será un club más. El nuevo Gallos buscará destacar por su ética, por su forma de trabajar y por su conexión con la ciudad.
“Un par de cosas que no son negociables: honestidad, integridad, trabajo duro y compromiso con la excelencia. Queremos que todos en este club sean los mejores en su rol. Queremos que todos se den cuenta de que estamos aquí para ser parte de la comunidad, no solo en el fútbol sino en todo lo que representa la comunidad”.
Este mensaje fue recibido con entusiasmo tanto por los aficionados como por las autoridades locales, que durante años han visto pasar proyectos de corto plazo, sin una base sólida ni una visión clara. Ahora, por primera vez en mucho tiempo, hay un plan estructurado, con respaldo financiero, institucional y humano.
Querétaro: tierra fértil para soñar
El alcalde ‘Felifer’ Macías también tomó la palabra para darle la bienvenida al nuevo dueño de Gallos Blancos. En su intervención, destacó que esta inversión es una señal de confianza en la ciudad y de su crecimiento sostenido.
“Estamos muy felices por esta nueva era. Estoy convencido de que vamos a tener un equipo de primera y de excelencia. Esta inversión y la confianza de Marc reflejan lo que es Querétaro: una ciudad dinámica, moderna, con identidad y con una gran afición”.
Y no es para menos. Querétaro se ha posicionado como una de las ciudades más pujantes del país, tanto en lo económico como en lo social. Su ubicación estratégica, su crecimiento industrial y su cultura deportiva la convierten en una sede ideal para desarrollar un proyecto futbolístico de alto nivel.
La Liga MX también celebra
Para la Liga MX, la llegada de Spiegel representa mucho más que un cambio administrativo. Así lo expresó Mikel Arriola, presidente del organismo, al subrayar que esta operación es una señal clara del interés internacional que está generando el fútbol mexicano.
“La inversión de 120 millones de dólares es histórica para la Liga MX. Refleja el crecimiento económico sostenido del fútbol y del país. Este es un mensaje muy fuerte para todos: México es tierra de oportunidades deportivas y comerciales”.
Arriola también reconoció la importancia de tener clubes financieramente sólidos, con propietarios comprometidos con la transparencia y el desarrollo sostenible del deporte.
Un nuevo comienzo con sabor a revancha
Para muchos, Gallos Blancos es un club con alma, con una afición fiel que ha resistido tormentas. Desde el descenso, las múltiples ventas de franquicia, los escándalos administrativos y, más recientemente, los lamentables hechos violentos en el estadio, Querétaro ha estado en el ojo del huracán más de una vez. Sin embargo, también ha sido símbolo de resiliencia.
La llegada de Spiegel es, para muchos, una segunda oportunidad. Una oportunidad para volver a creer, para dejar atrás los errores y construir desde las bases un equipo que no solo compita, sino que inspire.
Ilusión renovada en el corazón albiazul
La ciudad respira fútbol. Las camisetas vuelven a verse en las calles. Las redes sociales se han llenado de mensajes de esperanza, de bienvenida, de apoyo. No es exagerado decir que el anuncio ha revivido la llama del aficionado queretano. Y eso, en el mundo del deporte, es tal vez la inversión más importante de todas: la fe de la gente.
Gallos Blancos cumple 75 años. Y lo hace de la mano de un proyecto que quiere honrar el pasado, transformar el presente y soñar con un futuro grande. Marc Spiegel ya está aquí, y con él, la oportunidad de que Querétaro vuelva a tener un club digno de su gente.