Así como la Fiera del León fue excluida del Mundial de Clubes debido a la multipropiedad de Grupo Pachuca, muchos de los equipos de la Liga MX corren riesgo de no participar en torneos internacionales debido a esta situación y es que, además de Grupo Pachuca con los Tuzos y León, está Grupo caliente con Gallos y Xolos, Orlegui con Santos y Atlas, y Azteca con Mazatlán y Puebla, que además son dueños de una parte minoritaria también de Atlas y Santos, lo cual es una locura en nuestra bendita Liga MX.
Entre las acciones, además de evitar que estos equipos puedan participar en eventos como la Concachampions, Mundial de Clubes, Copa Intercontinental e incluso si se llegara a regresar en algún momento a la Copa Libertadores o a la Sudamericana, también habría repercusiones en otros aspectos; y es que, tras bambalinas se cocina que, para acabar con esta situación, la FIFA podría determinar que no existan fichajes entre equipos de los mismos dueños y haya una separación administrativa ya constituida ante la Liga MX y la FIFA mientras operan de esa manera los clubes.
Es decir, a pesar de que los Gallos con este nivel no están para jugar este tipo de competencias internacionales, tampoco podrían hacer fichajes como los que tiene acostumbrado Grupo Caliente entre ambos clubes (por una parte, benéfico, pero cabe recordar que la mayoría de los jugadores en Gallos pertenecen a los Xolos de Tijuana).
Esta es una situación que evidentemente ha estado sobre la mesa en cada reunión de dueños de la Liga MX y que han prolongado por muchos años esta decisión y ahora, ante la presión de FIFA, se tendría que acelerar el proceso para que estos equipos que tengan un mismo dueño sean vendidos a nuevos inversionistas, cosa que está pasando ahora en Puebla, donde ya un grupo de empresarios mostró interés en comprar a la Franja y así deslindarse completamente de Azteca e ir acabando con la multipropiedad.
En Gallos Blancos ha existido interés diverso por algunos inversionistas, un grupo de empresarios provenientes de Atlanta visitaron la ciudad, el estadio y las instalaciones del Club, así como al gobernador y a los directivos de Gallos con esa misma intención; otro caso más fue el grupo de empresarios integrado por la familia Achar Levy y otros más que se sentaron para ver las condiciones de una posible compra, pero en ese momento Grupo Caliente no estaba dispuesto a vender.
El tema es complejo y seguramente la FIFA pondrá alguna fecha límite para que estos clubes cambien de dueño, o en su defecto, limitarlos a todas estas condicionantes ya mencionadas, la no participación en torneo internacionales, la limitante de los fichajes y la independencia administrativa.
Por ahora los Gallos siguen con Grupo Caliente y aunque hay un grupo inversionista muy interesado en adquirir al equipo, no será hasta el final del torneo donde se podrá ver con mayor claridad esta posibilidad, que les puedo asegurar, tiene muchas condicionantes para que se dé esta posible venta.