ENTREVISTA EXCLUSIVA CON SANTIAGO CARBONELL

Primera Parte

 

Para iniciar el último mes del año celebrando la etapa navideña, me encanta la idea de presentarles una entrevista con un hombre al que admiro y respeto, pues sus palabras reflejan, al igual que su obra, el temple y la sensibilidad de un grande: Santiago Carbonell.  Querétaro le abrió sus puertas y lo cobija desde hace varias décadas, además de ser el espacio en donde ha despegado su brillante trayectoria. Carbonell, el artista plástico ecuatoriano que desde su Museo-Fundación en la calle de 5 de Mayo, número 90, en el centro de Querétaro, nos concedió una entrevista exclusiva para todos los lectores del periódico Magazine de Querétaro. Una agradable conversación, muy íntima e interesante, en donde el alma de este gran artista nos permite asomarnos, vislumbrando sus miedos, sus pasiones y sobre todo su visión de la realidad.  Aquí les presento al hombre detrás del mito.

Angélica Marti Arvizu (AMA).- ¿Quién es Santiago Carbonell?

Santiago Carbonell (SC).- Me imagino que una persona que trata de ser persona. Hace poco era un joven pintor y ahora me considero un pintor un poco más maduro.  Me considero una persona normal y corriente. No me gusta hacer diferencia entre los artistas y la gente común. Creo que singularmente hay un artista dentro de todos nosotros. Recuerdo que en la tierna adolescencia me gustaba también la poesía y la compartía con muchos amigos. La guitarra, en fin, el canto, y yo tuve la suerte de que me pude dedicar a esto, pero yo creo que todos tenemos un talento, si no es para una cosa, es para otra. Creo que es muy importante que el arte sea un poco de todo.

 

AMA: ¿Cuál es su formación académica, maestro?

SC: Ninguna

 

AMA: No me diga que… ¿es usted autodidacta?

SC:  Sí, apenas terminé la prepa, porque siempre odié estudiar. Me gusta aprender, pero odié estudiar. Tuve la suerte de tener quince años, cuando en 1975 estaba de moda la revolución maoísta, la revolución cultural, y a través de Mao aprendí que lo primero que debes hacer es reeducarte. Y yo en mi caso me auto eduqué.  Hay una frase que me gusta mucho y que no recuerdo de quien es, que dice: “Acabo de dejar mis estudios para así poder continuar mi educación”.

 

AMA:  ¿Qué es lo que le inspira a pintar? He visto varios rostros en su obra, bastante especiales, por cierto, ¿Cuál es la musa más exquisita desde su perspectiva?

SC: Yo no creo en la inspiración, creo en el trabajo y en la voluntad. Una voluntad potente  le gana a la pereza, a la desidia y al olvido.

 

AMA: ¿Cuántas veces a la semana se dedica a pintar? ¿Cuántas horas le da a su carrera?

SC:  Es mi profesión,  como la de cualquier obrero del arte.  Me levanto todas las mañanas muy temprano, a las cuatro de la mañana, y trabajo más o menos diez horas seguidas, hasta las tres de la tarde, y de ahí descanso. Hay que trabajar todos los días, a la pintura la considero una diosa muy traicionera y casquivana que si no la cuidas es muy posible que se vaya con otro.

AMA:  ¿Desde qué edad empezó a pintar?

SC:  Esa es una pregunta típica que no sé bien contestar. No me acuerdo cuándo hice mis primeros dibujos.  Recuerdo que el primer dibujo que tengo fue un toro que hice en 1968. Un año de grandes revoluciones y de grandes sucesos.  Mataron al Che Guevara.  Hubo masacres en México, en mayo, París ardía.

 

AMA:  ¿Cuál de sus obras es su cuadro preferido?

SC:  Mi cuadro preferido es el que tengo en el caballete. Es como a tu mujer. A la que tienes que querer es a tu mujer, no puedes ir metiéndole mano a las mujeres de los demás o a tus novias pasadas. Eso no tiene sentido. Tienes que querer a tu mujer del presente, y mi mujer presente es el cuadro de cada día. Yo vivo sin duda el presente.

AMA:  ¿Y la eternidad? Porque su obra es eterna. Es bellísima y trascendental.

SC:  No, las obras no son eternas.  El hombre construye “seudo” eternidades porque se da cuenta de que esta vida es muy corta y se apega a los objetos. Producir arte de cierta manera pues… es muy posible que dentro de 200 años los tiren. 

 

AMA: Pero con el internet ahora y los archivos cibernéticos ya se pueden conservar las obras de los grandes artistas como usted.

SC:  Pueden ser eternos, pero acordémonos que nosotros mismos, en dos generaciones estamos condenados al olvido. Muy probablemente nuestros bisnietos ya no sepan ni quiénes somos, ni qué hicimos, ni les importe.

 

AMA:  Ahora me gustaría hablar más del hombre. ¿Qué le apasiona a Santiago Carbonell en la vida?

SC: Pues en realidad no sé si soy muy apasionado o no, pero tengo una afición muy fuerte al trabajo, al esfuerzo, a la cocina, a leer, a escuchar música y, sobre todas las cosas, a viajar,  soy un vicioso del viaje.  Siempre tengo una maleta lista y he tenido la suerte de que he podido viajar mucho, sobre todo por nuestra América Latina, que es un continente precioso y que a veces la gente no la valora con su grandeza. Es un continente que tiene mucho qué dar y mucho qué enseñarnos.

 

Segunda Parte

 

Para continuar celebrando el mes de diciembre, he querido evocar la vida con colores y belleza a partir de una entrevista con uno de los grandes artistas contemporáneos en México: Santiago Carbonell. Aquí les presento la segunda parte de la entrevista del  hombre detrás del mito.  La próxima semana publicaremos la última parte.

 

Angélica Marti Arvizu (AMA).- Como latino, ¿cómo ve México?

Santiago Carbonell (SC).- Lo veo bastante triste.  Hace tiempo que impera la violencia, el desorden y la corrupción. Uno no puede estar contento por eso. Estoy contento porque creo mucho en el pueblo de México y hay que tener una esperanza. Y hay que vivir una revolución eterna, como bien lo dices tú. Hay que transformarse y dejar de lado ciertas tradiciones nefastas. Sobre todo a nivel económico y político. Se necesita más justicia social.

 

AMA.- ¿Y por qué Querétaro? ¿Cómo fue que decidió venir a Querétaro y quedarse aquí?

SC.- Todas las cosas importantes de la vida no las eliges, yo creo que del cielo caen.  Nunca tuve la decisión de venir a vivir a Querétaro, vine de visita y no me fui nunca. La verdad nunca pensé en venir aquí y quedarme. Me prestaron una casa aquí para venir a pintar.  Conocí a mi mujer, conocí amigos y me gustó, y al final me quedé porque me siento muy a gusto.

 

AMA.- Retomando un poco la vida íntima de Santiago Carbonell, me gustaría saber cuáles son sus miedos.  ¿Tienes miedos, Santiago Carbonell?

SC.- No tengo miedo ni siquiera a la muerte. No tengo miedos, pero tengo mis fantasmas que me despiertan en la noche. Sobre todo los sueños creativos. Las ideas que tengo para mi trabajo y que sé que jamás las voy a poder realizar. Y por eso se quedan en sueño.

 

AMA.- ¿Tiene usted algún recuerdo de algo maravilloso que le haya sucedido aquí en México?

SC.- Tengo muchos.

 

AMA.- ¿Algún recuerdo entrañable, por ejemplo?

SC.- Si me lo preguntas tan de golpe, parece como si yo tuviera una vida muy plana y muy poco importante. Porque en este momento, no me acuerdo efectivamente de nada, pero… Bueno, casi me ahogo en el Mar de Cortés navegando y casi naufrago en un barco, y desde entonces me persiguen unos sueños en los cuales estoy nadando entre olas en la noche.  Y eso fue lo que me pasó y se me repite con frecuencia.

 

AMA.-  ¿Cuál es su elemento? ¿Cuál es su signo zodiacal?

SC.-  Soy Leo

 

AMA: Es fuego, fuego puro, ¿cuál es su color preferido?

SC.- Un pintor no puede tener un solo color preferido. Habiendo miles de millones de colores en el universo, querer sólo uno no tiene ningún sentido. Lo podía tener cualquier persona, pero un pintor no.

 

AMA.-  Su obra es muy realista y yo siento que tiene una pasión intensa dentro del colorido de sus obras.  En cada color de su obra yo veo mucha pasión.  El estilo que usted pinta es hiperrealista, ¿no?

SC.- Bueno, en realidad el hiperrealismo es una tendencia que nació en los Estados Unidos, por ahí del año 75. A mediados de los setentas. Y de lo que se trataba era de pintar imágenes con un toque fotográfico. La mayoría de pintores realistas vienen de la ilustración. A mí me interesó el tema del hiperrealismo, pero lo fui abandonando por una pintura más lírica, más poética. El hiperrealismo es demasiado frío para mi gusto.  De lo que se trata en el hiperrealismo, en el foto realismo, es que el pintor no deje huellas de su personalidad, de su ser.  Yo prefiero el realismo de tipo lírico, poético.

 

AMA.- ¿Qué artistas admira usted?

SC.- Yo admiro a todos los artistas que sean capaces de ganarse la vida con su trabajo. Después de bombero, esta es una de las carreras más difíciles.

 

AMA.-  Usted tiene una escuela, ¿verdad? ¿Apoya usted a los nuevos artistas?

SC.- He dado clases durante veinticinco años en la universidad. He dado muchos cursos.  Para mí dar clases es muy importante, porque me gusta mucho estar en contacto con los jóvenes.  Aquí en el museo tenemos una fundación para ayudar e impulsar la carrera de los jóvenes artistas. Para ayudarlos a que se puedan convertir en artistas profesionales.   Creemos que es muy importante apoyar a los nuevos talentos. Creemos que la etapa entre 18 y 23 años para un joven artista es radical y muy importante. Apoyar el futuro de estos artistas en varios aspectos, de eso se trata la fundación.

 

Angélica Marti Arvizu (AMA).- ¿Cómo ve el futuro Carbonell?

Santiago Carbonell (SC).- ¿El futuro? Hay un proverbio chino que dice que el pasado ya pasó, el futuro aún no viene, ¡vive el presente, que es lo único que tienes!  Siempre trato de no preocuparme por el futuro, no sé pero coincido con algunas personas que piensan que el futuro siempre será mejor que el pasado. Es decir, las condiciones de vida son mucho mejores hoy que hace 20 años, por ejemplo. Hay mucha gente nostálgica que piensa que cualquier tiempo pasado fue mejor. Yo pienso que cualquier tiempo en el futuro siempre será mejor.

 

AMA.- ¿Y el mundo? ¿Cómo ve usted el mundo?

SC.- Hoy, por hoy, a veces me da un poco de repelús ver las noticias y lo que pasa.  Los extremismos de cualquier tipo, los fundamentalismos. La gente con el Corán, la Biblia y dos libritos más que pretenden entender todo el fenómeno humano y eso es totalmente equivocado. Llegamos ahí a los dogmas, a las formas dogmáticas de ser y pensar y obviamente a los fundamentalismos que creo que es la gran lacra del siglo XX y del XXI.

 

AMA.- Los artistas perciben el mundo que les rodea y lo vomitan a través de su obra de forma catártica. Su obra habla sobre rostros expresivos. Pero, ¿qué es lo que más le gusta pintar a Santiago Carbonell? ¿El rostro humano? ¿Le apasiona el rostro humano?

SC.-  No, no, a mí me da igual pintar cualquier cosa. Yo no pinto porque me guste pintar algo. 

AMA.- Lo que sí sé es que no le gusta pintar bajo encargos, ¿verdad?

SC.-  No eso no.  A mí me gusta pintar lo que me late ese día, y trabajo con mucho amor y mucho cuidado, pero vamos, me gusta pintar cualquier cosa, todo. Ni siquiera estoy muy convencido de que me gusta más mi estilo que el de otros. Yo no planeo lo que pinto, lo que me gusta es embarrarme y jugar con el color. La pintura es menos seria de lo que parece y es divertida.  Hay que tomarlo con diversión. Como un juego.

 

AMA.- ¿Y la planea?

SC.- Sí, lastimosamente me pasa lo mismo que a la mayoría, tenemos más planes que proyectos reales. Siempre tengo más proyectos para hacer que los que puedo hacer en realidad. Ya lo tengo todo muy planeado. Pero no quiere decir que un día cambie y me vaya por otro sitio. Considero ser un hombre muy calmo y bastante tranquilo y no me agobio por casi nada. Tomo las cosas como vienen. Y las disfruto como vengan.  Hay que torear al toro que tenemos cada día.

 

AMA.-  ¿No le gustaría pintar ángeles?

SC.- No  (meditativo y mirando al cielo respondió). No, porque soy un pintor realista.  Me gusta pintar lo que existe, no lo que no existe.

 

AMA.- Bueno, en el programa de la Revolución Elemental con “Angelpanter” que yo presento,  el concepto es que en cada ser humano habita un ángel en su corazón.

SC.- Sí, probablemente. Dalí decía, cuando les daba un montón de consejos a los estudiantes, les decía que estudiaran arquitectura, que hagan esto o aquello, que debes  comer esto, etc., 500 consejos les dio, e incluso hizo un libro que se llama 500 consejos.  Y decía, al terminar el libro:  “Joven pintor; estos quinientos consejos no te servirán de nada si tu mano no está dirigida por un ángel.  Habla del lenguaje, para mí poético.  Los ángeles son entes de la poesía, no de la realidad concreta. Si me guía la poesía, entonces estoy contento”.

 

AMA.- Para cerrar esta entrevista me gustaría que nos diera un mensaje para los seres poderosos en este mundo.  Porque usted, como artista plástico, sensible y creativo, bueno, yo soy idealista y me gusta motivar a los artistas que entrevisto para que den mensajes que ayuden a mejorar este planeta. ¿Qué mensaje les daría usted a los seres poderosos en este mundo para ayudar a cambiar este planeta y mejorarlo?

 

SC.- Primero les diría que dejen de ser poderosos, o que dejen de creer en su poder.  Porque el poder no existe y no lo tienen ellos. El poder lo tiene la voluntad de los pueblos, no la voluntad de las personas y de los individuos. Que si se creen demócratas de verdad que dejen de creerse los poderosos gobernantes, que sean más gentes de voluntad y de iniciativas. Que escuchen más a sus pueblos que tienen cerca y que les den a ellos la voluntad y la decisión de lo que tienen que hacer. 

 

Y es así que cerramos el año festejando las fiestas decembrinas con esta interesante entrevista, invitándolos a visitar, en el corazón de esta bella ciudad de Querétaro, el hermoso museo de este gran artista, el Museo-Fundación Santiago Carbonell, en la calle de 5 de Mayo número 90, en el Centro Histórico, con horarios de miércoles a viernes de 11:00 a 14:00 y de 17:00 a 20:00 horas, y los sábados de las 11:00 a las 18:00 horas. 

 

Acceso libre y disponibilidad de visitas guiadas a grupos.

Contacto: Esta dirección de correo electrónico está siendo protegida contra los robots de spam. Necesita tener JavaScript habilitado para poder verlo.

Teléfono 442 2128052.

 

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