Cerca de 70 personas que laboraban como verificadores y supervisores de verificación fueron citados a las instalaciones del INEGI en la colonia La Capilla, para ser informados sobre la rescisión de su contrato que vencía el 17 de abril de presente y sin recibir mayores explicaciones.

Este personal se encontraba realizando la segunda etapa del Censo de Población y Vivienda 2020, el cual fue suspendido por cuestiones de la declaratoria de emergencia.

El personal denunció la falta de pago de gastos de campo, la adquisición de un gel, y el pago de su quincena de abril.

“No nos han pago gastos de campo, una semana, nos deben gastos para el gel, nos hicieron comprarlo; nos deben pagar la primera quincena de abril que es cuando terminaba nuestro contrato y nos dijeron que nos van a pagar hasta hoy”, señalaron en entrevista.

“No firmamos vamos a organizarnos para buscar asesoría legal”, manifestaron varias de las inconformes, a las cuales se les entregó el documento para firma.