Contra Mitos y Tabúes
En México se han implementado esfuerzos de concienciación y promoción para la donación de órganos y tejidos pues aún existe un fuerte estigma sobre este tema, y ya sea por creencias, costumbres o desinformación, son muchos los obstáculos que se presentan.
Pese a que se han incrementado considerablemente las donaciones de órganos y tejidos en la entidad, aun falta mucho que trabajar, consideró Lucía López Otero, directora operativa de la Asociación ALE en Querétaro.
El estado ocupa la cuarta posición nacional con mayor número de donaciones de tejidos y órganos. De acuerdo con la Secretaría de Salud del estado, desde 2006 a la fecha se han realizado 426 trasplantes de riñón, 660 de córnea y alrededor de mil donaciones cadavéricas.
Pero los mitos que pesan sobre la donación de órganos dificultan las cosas. “Mucha gente piensa que a la hora de donar un órgano, si es en vida, que tu vida va a cambiar completamente, que ya te fregaste. Si se trata de donador cadavérico la familia a la hora de donar piensa: Ay, van a mutilar a mi hijo, me lo van a entregar muy feo… tenemos que aprender que eso no es así. Aún nos falta mucho en México, todavía no tenemos esa cultura de la donación”, dijo López Otero.
Uno de los principales problemas es que pese a que en vida se tenga el deseo de donar, son legalmente los familiares los únicos que pueden tomar la decisión. “Creo que ese es uno de los principales obstáculos, que la familia a la hora que la persona lamentablemente fallece, no quieren (donar los órganos de su familiar). Aunque hayan platicado previamente, hay muchas familias que no les gusta, se echan para atrás, y son ellos quienes tienen la última palabra (…) No importa estar en una lista de espera, que tengas tu tarjeta (de donador), que tú pongas en tu licencia que quieres donar tus órganos, si no hablas con tu familia y ellos realmente no están convencidos nunca vas a lograrlo.”
De acuerdo con Lucía López, muchas personas solicitan información sobre el proceso de donación, sobre todo en donaciones cadavéricas, pues se tienen creencias de que el cuerpo del donante será mutilado y se regresará el cuerpo en trozos a los familiares. Esto es falso. En el proceso de obtención de órganos la intervención quirúrgica cumple todos los requerimientos de una cirugía de la más alta complejidad y riesgo. El especialista realiza incisiones poco visibles, dejando debidamente suturado el cuerpo, que es tratado con dignidad y respeto, tal como lo establece la Ley General de Salud en el Artículo 346.
Otro mito es que la donación promueve el tráfico de órganos, pero es todo lo contrario. Además, con la donación se procura que los órganos y tejidos potencialmente utilizables sean tratados de manera oportuna y con los cuidados médicos para garantizar el trasplante. También existe el mito de que si eres donador de órganos, en caso de algún accidente los doctores y el hospital no te darán prioridad para salvar tu vida. Esto es falso, pues existen condiciones para que el donador pueda donar: si la muerte es producto de un paro cardiorrespiratorio, únicamente se podrán donar tejidos como hueso, piel, córneas, tendones, válvulas cardiacas, cartílago y vasos sanguíneos, arteriales y venosos; y si se presenta muerte cerebral, se podrán donar tanto órganos como tejidos: corazón, pulmón, hígado, riñones, intestino, páncreas y los tejidos mencionados anteriormente.
Pese a tantos mitos hay buenas noticias, pues apenas el pasado 20 de febrero el Instituto Mexicano del Seguro Social registró la primera donación multiorgánica del año, gracias a una familia queretana que tomó la decisión de donar los órganos de una mujer de 37 años que falleció por aneurisma. Se benefició así a 5 personas, las cuales tendrán la oportunidad de mejorar e incluso salvar su vida, ya que los órganos donados son el hígado, los dos riñones y las dos córneas.
Actualmente más de 21 mil pacientes están en lista espera para obtener un órgano o tejido que les permita continuar su vida con dignidad y mejor salud; alrededor de 12 mil esperan un riñón y 8 mil una córnea, órganos y tejidos que más se necesitan. Lucía López declara que 80% de los pacientes mueren mientras esperan un órgano, ya que el proceso de compatibilidad y análisis clínicos discrimina muchas posibilidades.
“La insuficiencia renal ha subido muchísimo en los últimos años, Querétaro como en 10% más, y lamentablemente más de 80% muere esperando, además de que solo 24% de la población mexicana cuenta con seguro social, sin el cual es casi imposible el trasplante, por costoso.”
¿CÓMO PUEDO SER DONADOR?
Para ser donador en vida se deben cumplir ciertos requisitos: ser mayor de edad y estar en pleno uso de facultades mentales; estar sano y ser compatible con la persona que va a recibir el órgano; recibir del médico que va a realizar el trasplante información sobre los riesgos de la donación; otorgar el consentimiento por escrito; tener parentesco por consanguinidad (padres, hermanos, abuelos, primos), por afinidad (estar unidos por matrimonio o concubinato), unión civil (entre adoptado o adoptante) o, en su caso, ser un donador vivo no relacionado (sin afinidad).
El Centro Estatal de Trasplantes de Querétaro (CETQRO) proporciona información detallada sobre los procesos de donación; en vida se puede donar un riñón, segmento de hígado y médula ósea. En el caso de los menores, solo pueden donar médula ósea (siempre bajo el consentimiento de los padres).
Se considera a donadores en vida a todos los hombres y mujeres de entre 18 y 60 años (aunque puede haber donadores de más de 60 años en buen estado de salud y sean aceptados). En este caso deben tener parentesco por consanguinidad (padres, hijos, abuelos), afinidad (estar unidos por matrimonio o concubinato) o civil (adoptado y adoptante).
Si quieres donar tus órganos al fallecer, platica del tema frecuentemente con tus familiares, de manera que tengan presente tu deseo de compartir una esperanza de vida a otras personas. Se consideran donadores cadavéricos a las personas de entre 2 meses de edad y más de 90 años, y la donación dependerá de la valoración que realicen los médicos y las causas de la muerte.
Tratándose de menores que han perdido la vida, sólo se podrán tomar sus órganos y tejidos para trasplante con el consentimiento de los representantes legales. En el caso de incapaces mentales y otras personas sujetas a interdicción, no podrá disponerse de sus componentes, ni en vida ni después de su muerte. Las mujeres embarazadas con vida podrán donar solo en caso de que el receptor estuviere en peligro de muerte y siempre que no implique riesgo para la madre ni para el producto de la concepción.
En términos médicos son pocas las contraindicaciones absolutas para la donación: infección por el Virus de Inmunodeficiencia Humana (VIH) o algún otro virus activo; deterioro severo de las condiciones de salud; infección por virus o bacteria; tumores malignos…
Cada persona tiene el derecho de decidir donar o no, pero si no lo han comentado y no existe ningún documento legal que garantice el cumplimiento de su voluntad, la familia puede decidir lo contrario. Por eso es muy importante que se platique con familiares respecto del deseo de donar órganos después de la vida, lo que facilitará que respeten la última voluntad sobre el destino de sus órganos.